Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2020

Eva, ahora descansa.

 Sin duda alguna uno de los recuerdos más vívidos que tengo de mi abuela Eva, es ese que sucedía no tan a menudo como yo hubiera querido, el despertar; después der que mi madre nos dejara en su casa para que más tarde nos mandara a la escuela, y ella pudiese irse a trabajar, con el olor de esas gorditas de azúcar que ella preparaba con gran habilidad,  y es que sin duda no he probado algunas más sabrosas que las de ella. Era la mejor manera de levantarse, muchas veces antes de un grito porque ni siquiera el abundante aroma de la harina dulce cociéndose nos levantaba,  pero estoy seguro que era ese olor el que me invitaba a abrir los ojos para rápidamente sentarme a la mesa y comer algunas de esas delicias,  mis favoritas eran con mantequilla y estaban tan calientitas que ésta se derretía y se absorbía en la delgada masa que adquiría una sensación húmeda que provocaba una explosión de sabor en la boca, claro que no faltaba que las pudiésemos comer con frijolitos machacados, que si algui